Cuando de cuidar nuestros espacios se trata, no podemos escatimar en costos ni en implementos, por eso hoy en día son más las personas que utilizan los sensores de movimiento de jardín. Estas también denominadas lámparas de exterior con sensor de movimiento funcionan encendiéndose de forma automática cuando bajamos las escaleras en la mañana, al acercarnos a la puerta principal en medio de la noche e incluso cuando caminamos por la tarde a través de nuestro hermoso jardín.
¿Qué tipos de sensores de movimiento de jardín existen?
Existen diferentes tipos de sensores de movimiento que puedes utilizar en tu jardín, cada uno con sus propias características y ventajas. Los tres tipos más comunes son:
Sensor de Movimiento de Infrarrojos Pasivos (PIR): Este tipo de sensor detecta el calor emitido por los cuerpos en movimiento, por lo que es ideal para detectar la presencia de personas o animales en tu jardín.
Sensor de Movimiento Ultrasónico: Este sensor utiliza ondas sonoras para detectar el movimiento. Es ideal para detectar el movimiento de objetos que no emiten calor, como ramas, hojas o incluso el agua en una fuente.
Sensor de Movimiento de Microondas: Este sensor utiliza ondas de radio para detectar el movimiento. Es muy sensible y puede detectar el movimiento a través de paredes y otros obstáculos.
Cada tipo de sensor tiene sus propias ventajas y desventajas, y es importante elegir el que mejor se adapte a tus necesidades.
Sensores de movimiento para jardín infrarrojos (sensor PIR)
Los sensores de movimiento para jardines se han vuelto cada vez más populares en los últimos años. Estos dispositivos son capaces de detectar el movimiento humano y de los animales, lo que los convierte en una excelente herramienta para la seguridad del hogar y el cuidado de las plantas y flores en el jardín. Uno de los tipos de sensores más comunes son los infrarrojos, también conocidos como sensores PIR.
Los sensores de movimiento infrarrojos funcionan mediante la detección de la radiación infrarroja emitida por los objetos en movimiento. La tecnología PIR (Passive Infrared) que utilizan estos sensores permite que el dispositivo detecte cambios en la temperatura en el área en la que se encuentran instalados. Cuando se produce un cambio en la temperatura, el sensor de movimiento envía una señal a la unidad de control para que se active la iluminación, la alarma o cualquier otro dispositivo que se haya conectado.
Los sensores de movimiento PIR para jardines se utilizan generalmente para encender las luces en el jardín o la entrada del hogar cuando detectan movimiento. Esto no solo ayuda a ahorrar energía, sino que también proporciona una medida adicional de seguridad, ya que los intrusos pueden ser detectados antes de que lleguen a la entrada del hogar.
Además, los sensores de movimiento para jardines son también una excelente herramienta para el cuidado de las plantas y flores. La mayoría de estos sensores pueden ser ajustados para detectar solo el movimiento humano y no el de los animales, evitando así que las mascotas de la casa o los animales salvajes dañen las plantas y flores.
Sensores de movimiento para jardín de alta frecuencia y radar
Además de los sensores de movimiento infrarrojos (PIR), existen otros tipos de sensores de movimiento para jardines que pueden ser útiles dependiendo de las necesidades y objetivos de seguridad que se tengan. Dos de estos tipos son los sensores de alta frecuencia y los de radar.
Los sensores de alta frecuencia utilizan ondas de radio de alta frecuencia para detectar movimientos. A diferencia de los sensores infrarrojos que detectan cambios en la temperatura, los sensores de alta frecuencia detectan cambios en la frecuencia de las ondas de radio que emiten. Esto les permite detectar movimientos en un rango mucho más amplio que los sensores PIR, lo que los hace ideales para áreas grandes y abiertas como los jardines.
Otra ventaja de los sensores de alta frecuencia es que son capaces de detectar el movimiento incluso a través de las paredes, lo que los convierte en una excelente opción para los jardines que tienen paredes o cercas altas. Sin embargo, estos sensores también son más propensos a las falsas alarmas, ya que pueden ser activados por objetos en movimiento como ramas de árboles o la ropa que se mueve con el viento.
Los sensores de radar, por otro lado, utilizan ondas de radio para detectar movimientos. Estos sensores son especialmente útiles para la detección de movimientos a larga distancia y en condiciones climáticas adversas. A diferencia de los sensores PIR y de alta frecuencia, los sensores de radar pueden detectar objetos en movimiento a través de obstáculos y materiales como muros y árboles.
Sin embargo, los sensores de radar también son más costosos que los sensores PIR y de alta frecuencia, y requieren más energía para funcionar. Además, son más propensos a falsas alarmas debido a su alta sensibilidad a los cambios en las ondas de radio.
Sensores de movimientos para jardín por ultrasonido
Otro tipo de sensor de movimiento para jardín que puede resultar útil es el sensor de ultrasonido. Estos sensores emiten ondas de sonido de alta frecuencia y miden el tiempo que tarda en regresar el eco después de rebotar en un objeto. Si el tiempo es menor de lo esperado, el sensor detecta que hay un objeto en movimiento en la zona.
Los sensores de ultrasonido son útiles porque pueden detectar movimientos en áreas muy pequeñas y precisas, lo que los hace ideales para zonas específicas del jardín donde se quiera una detección precisa. También son resistentes a las interferencias externas como la luz solar y la lluvia, lo que reduce la probabilidad de falsas alarmas.
Sin embargo, los sensores de ultrasonido pueden ser menos efectivos en áreas abiertas y expuestas al viento, ya que el movimiento del aire puede generar eco y causar falsas alarmas. Además, estos sensores no son capaces de detectar movimientos a través de obstáculos como paredes y cercas.
Sensores de movimiento para jardín con cámaras integradas
Otra opción de sensor de movimiento para jardín es aquel que cuenta con una cámara integrada. Estos sensores combinan la detección de movimiento con la grabación de vídeo, permitiendo capturar imágenes de lo que está ocurriendo en la zona.
Los sensores de movimiento con cámaras integradas son especialmente útiles para aquellos que desean monitorear su jardín o propiedad en busca de posibles robos o intrusiones. Al detectar un movimiento, la cámara se activa y comienza a grabar. Además, algunos modelos cuentan con alertas en tiempo real que envían una notificación al teléfono móvil del propietario en caso de detectar movimiento.
Sin embargo, estos sensores suelen ser más costosos que otras opciones y requieren una instalación más compleja. También pueden surgir problemas de privacidad si se utilizan para monitorear zonas públicas o a vecinos sin su consentimiento.
¿Qué lámparas de jardín poseen sensor de movimiento?
Casi todas las que te puedas imaginar. En resumen podríamos decirte que estas funcionan muy bien en las zonas externas de la casa por ejemplo al lado de la puerta principal.
Lámparas de techo y jardín con sensor de movimiento: estas resultan la elección ideal para las zonas cubiertas por ejemplo porches.
Farolas con sensor de movimiento: son ideales para que ilumines los espacios o caminos de tu jardín.
Bolardos con sensor de movimiento: se pueden usar para los muros o paredes de tu jardín y balaustradas.
Lámparas solares que poseen sensor de movimiento, están disponibles con forma de faro, de bolardo o de aplique de pared.
¿Cómo funcionan los sensores de movimiento de jardín?
Aunque no lo sepa, los sensores de movimiento PIR no envían señales sino que las reciben mediante radiaciones de calor del ambiente que los rodea. Y funcionan en modo pasivo completamente. La luz se va a encender en el momento en el que exista una fuente de calor dinámica proveniente de personas o de animales y se quedara apagada ante la presencia de las fuentes de calor estáticas es decir del sol. Mientras que, los sensores de movimiento de alta frecuencia o sensores HF, que también pueden ser utilizados en los jardines emiten ondas electromagnéticas y estas reaccionan ante el reflejo de estas. Estos a diferencia de los anteriores trabajan activamente. Si un objeto se mueve, la frecuencia con la que estas ondas se reflejan va a cambiar, el sensor lo registra y como consecuencia la luz se enciende.
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